Son las 10.30h de la mañana y estamos en la consulta 8 de la sexta planta del ICO (Institut Català d'Oncologia) del Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona. Frente al Dr. Navarro, Mario, de 63 años, y un amigo suyo. Mario viene a recibir la segunda tanda de quimioterapia para tratar el linfoma que padece. Tras la consulta, le quedan siete aburridas horas por delante. "La quimio que debe tomar Mario tiene un medicamento que hay que poner muy despacito", nos explica el Dr. Navarro.

Hace pocos meses, a Mario le salió un bulto en el cuello que, poco a poco, se fue haciendo más grande. "Al final tenía 8 cm y sangraba todo el día por la boca", nos explica. Le diagnosticaron un linfoma de células B y le operaron el ganglio del cuello. Ahora se encuentra mejor pero todo el tema del ganglio le asusta un poco. Suerte que es muy simpático y divertido y se toma las cosas con humor. "Tengo un hambre que me muero", nos dice, "ahora sólo puedo comer líquido por el tema del cuello pero, cuando pueda, me comeré de todo. ¡Después de la quimio tendré que hacer régimen!".

 

Además, el caso de Mario es un caso especial porque es seropositivo. Por este motivo, además de la quimioterapia, el Dr. Navarro le pincha unos factores de crecimiento para asegurar que haya suficientes defensas en su cuerpo. El Dr. Navarro es especialista en casos de personas con linfoma infectadas por el VIH*. "Antes era distinto pero ahora el caso de un paciente con VIH que tiene un linfoma no es más grave que otro paciente. Como ellos están muy controlados por la medicación antirretroviral que toman, el tratamiento contra el linfoma es el habitual. Sólo añadimos los factores de crecimiento por si acaso para movilizar las defensas. Es más una precaución que otra cosa", nos explica el hematólogo.

Mario está un poco nervioso pero contento. Le gusta su médico y se toma las cosas con filosofía.

*Por lo general, los pacientes inmunodeprimidos presentan con mayor frecuencia linfomas no hodgkinianos (LNH). Su aparición está ligada al grado de inmunodeficiencia; suelen aparecer tarde en la evolución de la infección por VIH cuando el estado inmunitario se encuentra muy deteriorado.

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